Este miércoles, los mayores del Centro de Día Alpa de Huarte han vivido una jornada especial al asistir a la misa mayor de Huarte un evento que siempre ha sido una tradición para muchos de ellos, pero que en los últimos años se había vuelto complicado de disfrutar debido a la movilidad reducida y otras limitaciones físicas. Sin embargo, gracias a la colaboración y apoyo fundamental de la DYA, esta costumbre ha sido retomada con éxito.
La DYA, siempre presente en las actividades comunitarias que requieren apoyo logístico y sanitario, ha jugado un papel clave en esta ocasión, proporcionando transporte adaptado y asistencia para que los mayores pudieran desplazarse con comodidad y seguridad desde el Centro de Día hasta la iglesia. Este tipo de colaboración resalta la importancia de la solidaridad y el trabajo conjunto entre diferentes organizaciones de la comunidad, especialmente cuando se trata de facilitar que las personas mayores puedan seguir participando activamente en las tradiciones locales.
Los mayores han destacado lo bien organizados que estuvieron los traslados, agradeciendo el trato cercano y humano de los voluntarios de la DYA, que en todo momento estuvieron pendientes de sus necesidades.
El trabajo del Centro de Día Alpa: dedicación y cuidado continuo
El Centro de Día Alpa se ha consolidado como un espacio de referencia en Huarte para la atención y cuidado de los mayores. Su equipo de profesionales trabaja día a día para mejorar la calidad de vida de los usuarios, promoviendo su autonomía, bienestar físico y emocional, además de garantizar una atención integral y personalizada.
El centro ofrece una amplia gama de servicios, que incluyen actividades terapéuticas, recreativas y sociales, todas ellas orientadas a mantener activos a los mayores tanto física como mentalmente. Desde talleres de memoria hasta gimnasia adaptada y excursiones, el objetivo es que cada persona se sienta acompañada y valorada en esta etapa de su vida.
Además, el Centro de Día Alpa colabora estrechamente con familiares y otras entidades locales, como en este caso con la DYA, para hacer posible que los mayores sigan conectados con su entorno social y cultural. Esta reciente salida a la misa mayor es solo un ejemplo más del compromiso del centro con la comunidad y el bienestar de sus usuarios.
Esta iniciativa demuestra que, con el apoyo adecuado y la voluntad de trabajar en conjunto, es posible que las personas mayores continúen participando en las actividades y tradiciones que han formado parte de sus vidas durante tanto tiempo. Para el Centro de Día Alpa, su trabajo diario es mucho más que cuidado, es acompañamiento, respeto y un firme compromiso con la dignidad y los derechos de los mayores.
