El pasado sábado, las playas de Getaria se convirtieron en el escenario de un evento transformador y lleno de esperanza: el bautismo de buceo para 11 personas con diferentes discapacidades. Esta iniciativa fue organizada por el Club de Buceo Gran Azul y la federación de discapacidad COCEMFE Navarra. La actividad, que va más allá de sus beneficios rehabilitadores, brindó a los participantes la oportunidad de disfrutar de un "chapuzón de libertad y autoestima".
Durante la jornada, se realizaron inmersiones de unos 40 minutos, adaptadas a las capacidades de cada persona. Esta experiencia marítima complementa las actividades que se desarrollan durante el año en las piscinas de la Universidad Pública de Navarra (UPNA), con el objetivo de acercar el buceo a personas con discapacidad. Según los organizadores, el buceo adaptado proporciona no solo beneficios físicos sino también anímicos.
Miguel Carabantes, uno de los impulsores de esta disciplina en Navarra y parte de la iniciativa Burbujas Solidarias de FEDAS (Federación Española de Actividades Subacuáticas), explicó: "El buceo adaptado no solo favorece la relajación muscular, la elasticidad y la coordinación, sino que permite romper barreras de movilidad y disfrutar de una gran sensación de libertad, realizando bajo el agua movimientos que en su vida cotidiana les resultan difíciles o imposibles". Carabantes lideró la actividad con el apoyo de la Asociación S.U.R.E.M Navarra-Protección Civil, asegurando que todos los participantes salieran encantados, desde aquellos que apenas experimentaron la sensación de estar bajo el agua hasta quienes se animaron a probar el buceo, siempre bajo la supervisión de instructores y colaboradores voluntarios.
Desde COCEMFE Navarra destacan que esta experiencia es un verdadero "chapuzón de autoestima". "Poder realizar una actividad que al principio puede parecer fuera de sus posibilidades, como el buceo, les aporta alegría, autoestima y ganas de superar nuevos retos, además de la satisfacción de disfrutar del deporte en igualdad de condiciones", explican. Esta actividad es parte del programa de ocio de COCEMFE Navarra, que reivindica el ocio como un derecho y propone actividades inclusivas para la ciudadanía con discapacidad. "El ocio es más que disfrutar del tiempo libre; es una parte importante de la vida que nos conecta con la sociedad y es un derecho de todas las personas", afirman, destacando que a menudo este derecho se ve obstaculizado por la falta de accesibilidad y una menor oferta de actividades inclusivas.
El programa, apoyado por el Gobierno de Navarra y la Fundación 'la Caixa', ofrece diversas alternativas de ocio, como excursiones, eventos culturales, actividades en la naturaleza, buceo, sanfermines inclusivos y talleres, con el objetivo de garantizar que todas las personas, independientemente de sus capacidades, puedan disfrutar de un ocio pleno y enriquecedor.