Tras nueve días de fiesta, una vez que la Comparsa de Gigantes y Cabezudos ha participado en la Octava, se ha realizado el tradicional homaneje a la ciudad y bailado ante el alcalde de Pamplona y la Corporación municipal, ha llegado el momento de la despedida de los gigantes y cabezudos. Este año de regreso a la Plaza Consistorial tras el paréntesis del año pasado en la Plaza del Castillo.
Los gigantes han realizado los últimos bailes de las fiestas y se pusieron a la altura de pequeños y pequeñas para recibir su cariño.
Bailes, música y muchas sorpresas han hecho las delicias de toda la familia en una despedida que será un ‘hasta luego’, hasta el mes de septiembre cuando volverá a salir por el Privilegio de la Unión.