Esta tarde de sábado, 8 de junio, víspera de las elecciones europeas, miles de personas se congregaron en Pamplona para participar en la manifestación convocada por la plataforma "Yala, Nafarroa con Palestina". Según la delegación del Gobierno, aproximadamente 2.500 personas se unieron a la marcha, que partió a las 17:30 desde los cines Golem bajo el lema “Genozidioa Stop! Europa no seas cómplice”.
Dyna Kharrat, portavoz de la plataforma, señaló que la manifestación se organizó como respuesta a “la situación intolerable que estamos viviendo en estos momentos de durísimo genocidio, de máxima expresión de impunidad y previo a las elecciones europeas”. La marcha, que también tuvo su versión en Euskadi impulsada por Gernika Palestina, buscó denunciar la complicidad europea y exigir medidas económicas y comerciales para obligar a Israel a poner fin al genocidio y cumplir con las resoluciones de la ONU.
Kharrat pidió a la Unión Europea que suspenda su acuerdo de asociación comercial con Israel mientras no cese el genocidio. Destacó que el artículo 2 del acuerdo compromete a las partes a respetar los derechos humanos y los principios democráticos, y que el artículo 60 de la Convención de Viena faculta a las partes a suspender un tratado en caso de incumplimiento.
El llamamiento a la sociedad civil y a los agentes sociales fue claro: “Queremos situar la paz y la necesidad del cumplimiento del derecho internacional en el centro de nuestras reflexiones. Ambas son claves imprescindibles no solo en Palestina sino en el resto del mundo”. La manifestación se enfocó en exigir el alto el fuego, la desmilitarización y la negociación para garantizar el respeto al derecho a la autodeterminación y proporcionar a los territorios palestinos herramientas para vivir libres y acabar con la impunidad israelí.
El comunicado leído en euskera y castellano resonó con fuerza: “Nunca más un Gernika, nunca más un genocidio como el de Palestina”. Los manifestantes subrayaron que “el mundo está siendo testigo de la destrucción de un pueblo, una tierra, una población, con la complicidad de estados y organizaciones”, y proclamaron su firmeza y rabia ante la masacre.
El mensaje fue contundente: “Nosotras también nos unimos al pueblo de Palestina, ya convertida en símbolo de la dignidad humana. Y desde aquí decimos bien alto y bien claro: ¡¡No!! ¡¡No al estado sionista!! y sí, sí a los derechos del pueblo palestino!”. La manifestación concluyó con un llamado a la Unión Europea para que no colabore con el gobierno de Israel y actúe para terminar con la masacre.
Los manifestantes dejaron claro que su compromiso continuará hasta que se reconozcan todos los derechos del pueblo palestino. El grito “¡¡No al genocidio!! ¡¡Viva Palestina libre!!” se escuchó con fuerza, desde Bilbao y Pamplona hasta Palestina, resonando en los cuatro vientos.