Las obras del futuro parque de bomberos de Tafalla encaran ya su recta final. La consejera de Interior, Función Pública y Justicia del Gobierno de Navarra, Amparo López, ha visitado este lunes las instalaciones en construcción, cuya estructura principal y zonas de almacén ya están prácticamente finalizadas. Con una inversión de 5,19 millones de euros, se prevé que la infraestructura esté concluida a comienzos de 2026.
Los trabajos, que comenzaron en verano de 2024 con un plazo de ejecución de 18 meses, avanzan conforme al calendario previsto. A partir de ahora, las siguientes fases contemplan canalizaciones exteriores, urbanización, revestimientos, instalación de carpintería y acabados, así como la pavimentación del entorno.
Durante la visita, López ha estado acompañada por el director general de Interior, Salvador Díez, y por el director del Servicio de Bomberos / Nafarroako Suhiltzaileak, Iñaki Elías. La consejera ha subrayado el compromiso del Ejecutivo foral con la seguridad de la ciudadanía, reflejado tanto en la renovación de la flota de vehículos como en el impulso a infraestructuras modernas como esta.
«Este nuevo parque tiene un carácter estratégico para la Zona Media de Navarra», ha destacado López, haciendo hincapié en su capacidad para responder a las necesidades actuales y futuras del servicio de emergencias, tanto en medios humanos como técnicos.
El parque, ubicado en una zona clave para la atención a emergencias, prestará cobertura a unos 30.000 habitantes de 24 municipios y diez concejos. Podrá albergar a los 60 efectivos que actualmente operan desde Tafalla —36 bomberos de plantilla y 24 forestales incorporados durante la campaña de verano—, y contará con espacio para estacionar hasta diez vehículos pesados de intervención.
Sostenibilidad y funcionalidad
El nuevo complejo se ha diseñado bajo criterios de funcionalidad, eficiencia y sostenibilidad. Contará con un edificio principal, zona de prácticas, torre de maniobras, diez bahías para vehículos, helisuperficie y una arquitectura distribuida en zonas diferenciadas: públicas, privadas y de descanso. Además, se incluirá un circuito de descontaminación para separar las áreas ‘sucia’ y ‘limpia’.
La instalación de paneles fotovoltaicos cubrirá prácticamente la totalidad de la demanda energética del parque, reforzando su autosuficiencia y reduciendo su huella medioambiental.
La culminación de este proyecto supondrá un salto cualitativo en la red de atención a emergencias de Navarra y, en particular, para una comarca que hasta ahora contaba con unas infraestructuras más limitadas. La inversión refuerza así el compromiso institucional con la seguridad, la sostenibilidad y la cohesión territorial.
Redacción Navarra Sur
