Íñigo Errejón, portavoz de Sumar en el Congreso de los Diputados, ha anunciado su dimisión a través de sus redes sociales. Errejón ha decidido dejar su escaño en la Cámara Alta y todas sus funciones, poniendo fin a una década de intensa actividad en la política institucional. En un comunicado en el que ha explicado sus razones, Errejón ha reconocido que el desgaste físico y emocional que ha sufrido en este tiempo le ha llevado a tomar esta decisión.
Sin ambargo algunos medios como el diario Público vinculan esta salida de Errejón a un malestar en el grupo parlamentario de Sumar tras unas acusaciones sobre violencia machista.
Hola, yo soy víctima de acoso sexual por parte de Iñigo Errejon y quiero denunciarlo. @RamonEspinar @telediario_tve @laSextaTV @EFEnoticias @cristina_pardo
— Elisa Mouliaá (@ElisaMouliaa) October 24, 2024
Ante las informaciones conocidas esta semana, y tras comprobar su verosimilitud, Más Madrid exigió a Sumar la dimisión de Íñigo Errejón.
— Más Madrid (@MasMadrid__) October 24, 2024
Somos y seremos un partido comprometido contra la violencia machista.
— Sumar (@sumar) October 24, 2024
En su carta de despedida, Errejón dice que «En los últimos meses, y de forma más insistente en las últimas semanas, he ido pensando en que tenía que tomar algunas decisiones importantes. Hoy ha llegado el día de hacerlo», ha señalado Errejón, subrayando que su compromiso político viene desde que tiene uso de razón, pero que en la última década ha ocupado posiciones de representación pública que conllevan una alta exposición mediática.
Errejón ha expresado que ha sido un privilegio defender «las ideas más hermosas y justas» en uno de los períodos más intensos y duros de la política española. Sin embargo, también ha admitido que la primera línea política ha pasado factura a su salud física, mental y a su vida emocional. «El ritmo y el modo de vida en la primera línea política, durante una década, ha desgastado mi salud física, mi salud mental y mi estructura afectiva y emocional», ha confesado.
El portavoz de Sumar ha reflexionado sobre cómo la política institucional y mediática afecta a las personas que la ejercen, especialmente en términos de empatía, cuidados y relaciones personales. «En la primera línea política y mediática se subsiste y se es más eficaz, al menos así ha sido mi caso, con una forma de comportarse que se emancipa a menudo de los cuidados, de la empatía y de las necesidades de los otros», ha afirmado Errejón, señalando además que este tipo de subjetividad tóxica se ve exacerbada en los hombres por el patriarcado.
Errejón también ha compartido que lleva tiempo trabajando en un proceso de acompañamiento psicológico, pero que para avanzar en él necesita alejarse de la política institucional. «Para cuidarme, necesito abandonar la política institucional, sus exigencias y sus ritmos», ha asegurado. A su vez, ha destacado que su dimisión busca contribuir a la «renovación generacional y de cuadros e ideas» que las fuerzas democráticas necesitan.
Con estas palabras, Errejón se despide de una etapa «dura y apasionante», marcada por éxitos y errores, y se muestra dispuesto a seguir militando y comprometido, aunque fuera de la política institucional.