La ONG Save the Children y la Fundación Por Causa estiman que hay casi 147.000 niños migrantes en situación administrativa irregular viviendo en España, de los cuales un 37,7% tiene entre 0 y 4 años y un 19,4% entre 5 y 9 años. Así, señala que uno de cada cinco niños extranjeros está en situación administrativa irregular en España.
En un informe que se ha presentado este miércoles de manera online, ambas ONG han ofrecido una fotografía actualizada e inédita de las magnitudes y características de la infancia migrante en situación irregular en España.
Según el coautor del informe y director del área de Investigación de la Fundación Por Causa, Gonzalo Fanjul, de los 721.556 niños migrantes que viven en España, 146.773 están en situación irregular, con lo que la tasa de irregularidad de esta población es de un 20,4%, porcentaje que sube hasta el 45,5% en el caso de los niños que proceden de América del Sur y Central.
Así, la mayoría de los niños migrantes en situación irregular provienen de América del Sur y Central (un 71%). Colombia es el país de origen de más de 25.000 niños, seguido de Honduras (cerca de 16.000) y Venezuela (casi 15.000).
Por su parte, los niños procedentes de África subsahariana tienen un peso muy pequeño en la irregularidad. Con unos 310.000 niños migrantes –la más alta por continentes–, el número de niños en situación irregular no llega a los 19.000, arrojando una tasa de irregularidad de sólo el 5,9%.
El único país africano que destaca es Marruecos, que concentra casi un 7% de la infancia sin papeles, aunque el impacto relativo de la irregularidad es mínimo (un 4,2%) si se considera el número absoluto de niños (unos 241.000).
Los niños de 0 a 4 años, en concreto, componen alrededor del 25% de la población total de migrantes regulares en esa franja de edad en España, pero esa franja de edad concentra a uno de cada tres niños en situación irregular.
Dicha sobrerrepresentación de la infancia más pequeña podría ser debida a dos factores: la mayor presencia de nacionalidades latinoamericanas, que presentan tasas de irregularidad más altas, y la ausencia de medidas de regularización para los niños que nacen en España de progenitores sin papeles.
En cuanto a la composición por género, el 52% de la infancia sin papeles son niños y el 48% niñas, un porcentaje muy similar al de quienes están en situación regular en ese tramo de edad.