Las empresas dedicadas a las investigaciones están entre las más activas en el uso de la factura electrónica según el Estudio SERES de Implantación de la Factura Electrónica en España 2019. De acuerdo con este informe, el 1,81% de las empresas emisoras de factura electrónica y el 1,56% de las receptoras pertenecen al sector de la investigación
Por número de facturas electrónicas emitidas, el 2,23% del total nacional corresponden a este sector. Por su parte, el porcentaje de las recibidas se sitúa en el 3,40%. Según Alberto Redondo, director de Marketing de SERES para Iberia y LATAM “estos porcentajes son muy relevantes porque además de la buena penetración de la factura electrónica en este sector, el número de empresas de este sector no es muy grande. No obstante, se trata de un sector que, debido a su naturaleza y su ámbito de actuación, se encuentra muy avanzado a nivel tecnológico”.
Tamaño de empresas
Según el estudio, la mayor implantación de la factura electrónica se encuentra en la mediana empresa, con el 41,96% en emisión y el 35,70% en recepción. Le sigue la pequeña empresa, con el 27,49% en emisión y el 25,70% en recepción. En tercera posición aparecen las grandes empresas, donde el 19,98% emiten facturas electrónicas y el 29,54% las reciben. Finalmente, el 10,57% de las microempresas emiten facturas electrónicas y el 9,06% las reciben.
En sus conclusiones, SERES destaca que 2019 ha sido un año clave para el uso de la factura electrónica en las contrataciones públicas europeas. El pasado 18 de abril de 2019 marcó un nuevo avance hacia la administración electrónica. La entrada en vigor de la Directiva 2014/55/UE establecía la obligación para las Administraciones Públicas de los países de la UE de poder recibir y procesar sus facturas electrónicas según el estándar europeo.
El hecho de que los proveedores de las Administraciones Públicas comiencen a facturar de manera electrónica conlleva que el resto de empresas con las que mantienen relaciones comerciales también adopten la e-factura. Con la finalidad de facilitar al máximo este proceso, en España se puso en marcha la plataforma FACeB2B, a través de la cual los operadores económicos y particulares pueden remitir facturas a los subcontratistas de los contratos del Sector Público.
Datos nacionales
Según el Estudio, el número de facturas electrónicas procesadas en 2019 en nuestro país ascendió a 206.464.053 documentos, un 13,51% más que en 2018. Del total, 171.773.817 documentos -un 6,1% más que en 2018- corresponden a transacciones entre empresas (B2B), 22.292.891 a operaciones entre empresas y las administraciones públicas (B2G) y 12.397.345 a ventas de empresas a particulares (B2C).
Gracias al uso de la factura electrónica, en 2019 se ahorraron más de 1.600 millones de euros en la gestión de facturas emitidas y recibidas, y el equivalente en horas de trabajo de más de 442 años laborales. Además, se generó un impacto medioambiental positivo cercano a la superficie forestal del Parque del Retiro al eliminar el papel de facturas, sobres, etc. Según el estudio, el coste medio de recepción de una factura es de 7,22€ en papel y 2,27€ en digital y en emisión de 4,45€ en papel y 1,64€ en digital.
Fuente Comunicae